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Redacción. La sostenibilidad en una oficina es más que utilizar bombillas de bajo consumo y métodos tradicionales de reciclaje como las papeleras para papel o plástico. De hecho, es una oportunidad perfecta para darle un enfoque holístico al espacio de trabajo creando una sensación general de bienestar en la empresa.

Así lo aseguran desde Grupo Almansa, empresa con más de 40 años de experiencia en el sector de la fabricación y montaje de carpintería de aluminio.

“Las empresas que se enorgullecen de las prácticas de trabajo ambientalmente sostenibles tienen, además, una ventaja competitiva con beneficios adicionales. El ahorro de energía en el lugar de trabajo promueve un entorno más saludable”, afirma Juan Almansa, director general de Grupo Almansa, añadiendo que ello “puede marcar la diferencia en la reducción de su huella de carbono y aumentar el funcionamiento cognitivo de los trabajadores”.

La compañía destaca la existencia de estudios que demuestran que un lugar de trabajo más verde y sostenible impulsa de forma natural a tener una mayor productividad. Mientras que las oficinas interiores afectan de una manera negativa a la forma de trabajar de los empleados, las iniciativas ecológicas y sostenibles allanan el camino hacia un futuro mejor y consiguen que los trabajadores creen unidad y sentimiento de pertenencia a una empresa que se preocupa por su bienestar.

Para conseguir que un entorno sea más sostenible, Grupo Almansa ha señalado algunos simples cambios que pueden ser de gran ayuda:

Cambiar a materiales de impresión y embalaje más ecológicos. Si bien el mundo online ha tomado el mundo de los negocios por asalto, los suministros impresos, como las tarjetas de presentación, siguen siendo una parte importante de hacer negocios. Los propietarios de pequeñas empresas pueden reducir su impacto empleando materiales impresos y de embalaje reciclados. Se puede comenzar reemplazando los equipos obsoletos con modelos de alta eficiencia energética y apostando por el papel reciclado.

Utilizar la luz del día. La iluminación marca la diferencia cuando se trata de eficiencia y de aumentar los niveles de felicidad de los trabajadores. Sin embargo, la iluminación eficiente en el lugar de trabajo es, a menudo, algo a lo que no se le presta demasiada atención.

Por ello, introducir luz natural a través de ventanas de aluminio ayudará a reducir el consumo total de energía de un edificio. Combinado con la vegetación, la luz del día puede mejorar la creatividad y el aprendizaje y promover la salud.

Invertir en equipos ecológicos. La compra de equipos altamente eficientes y ecológicos puede ser una gran opción. Cuantas menos máquinas sean usadas, más pequeña será la huella de carbono. Para ello, con anterioridad, debemos verificar el consumo y la calificación de energía y optar por máquinas multiuso para reducir el desorden de cables y fomentar el ahorro de energía.

Una planta para cada escritorio. Las plantas de interior son importantes para mejorar la calidad del aire y reponer los niveles de oxígeno. Naturalmente, esto aumenta la salud y el bienestar en general y mejora la productividad y el rendimiento en el lugar de trabajo.

No al concepto abierto. Según un reciente estudio de Jungsoo Kim y Richard de Dear, de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Sydney, los trabajadores agrupados en un espacio abierto a menudo están menos satisfechos con su entorno de trabajo, aludiendo a la falta de privacidad y, específicamente, al ruido de fondo como la razón principal.

Por ello, es importante apostar por cerramientos acristalados que permitan disfrutar de ese concepto abierto, facilitando que la luz penetre, pero respetando la intimidad de los trabajadores.

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