Redacción. Laboratorios Rubió, farmacéutica española especializada en las áreas de reumatología, nefrología, urología, sistema nervioso central y riesgo cardiovascular, ha obtenido la certificación Great Place To Work tras la puesta en marcha de su plan estratégico de traslación de la cultura de la empresa a las personas que trabajan en la compañía.
"Nos sentimos muy orgullosos del equipo humano de Laboratorios Rubió y por ese motivo era especialmente importante para nosotros crear un entorno de confianza en el que desarrollar al máximo el potencial de cada persona", afirma Joan Ramon Llonch, director financiero y de RRHH de la empresa.
"La certificación Great Place To Work es una de las más reconocidas a nivel mundial, por lo que este sello de calidad supone para nosotros un gran impulso, ya que valida nuestras políticas de actuación", destaca Llonch.
Pelayo Rubió, CEO de la farmacéutica, añade que "en la puesta en marcha de esta iniciativa creímos que era el momento de dar un paso al frente y reforzar nuestro compromiso con las personas. También que debíamos fomentar el proyecto común, conservar el talento y atraer a nuevos colaboradores".
Laboratorios Rubió tiene su sede central en Barcelona y cuenta con una planta productiva de 2.900 m² construidos.
Su plantilla supera los 150 trabajadores, el 60 % mujeres, con una edad media de 46 años. Los perfiles más habituales van desde farmacéuticos, médicos o químicos a personal administrativo, financiero, de markerting o trabajadores especializados para el área productiva.
La compañía ha obtenido el certificado Great Place To Work gracias al desarrollo de acciones que van desde la formación continua a la creación de grupos de trabajo transversales, haciendo especial hincapié en las políticas de conciliación familiar, el fomento del deporte y la vida saludable y el impulso de actividades compartidas de responsabilidad social corporativa.