Redacción. La empresa catalana Bold creará 100 puestos de trabajo cualificados -mayoritariamente ingenieros- en Montmeló (Barcelona) con la puesta en marcha de una planta de producción de baterías eléctricas y diversos laboratorios para sacar al mercado tecnología propia en este ámbito.
La empresa, que cuenta ya con un centro de I+D con 35 ingenieros, diseñará y producirá baterías eléctricas destinadas a aviones híbridos, coches de alto rendimiento y motorsport.
La apertura de la nueva planta de producción, que estará plenamente operativa después del verano y contará con una superficie de 2.500 m², habrá supuesto la creación de 40 puestos de trabajo altamente cualificados -mayoritariamente ingenieros y operarios de la fábrica- en 2022 con la previsión de llegar a los 140 trabajadores durante 2023.
En concreto, la empresa se dedicará al diseño y producción de todos los componentes que forman parte de las baterías eléctricas para, entre otros, en el sector de la aviación.
Esto incluye la carcasa de fibra de carbono, el sistema de refrigeración, la electrónica y el sistema de control de energía. Bold, que adquirirá las celdas de proveedores especializados y las integrará en las baterías, es de las únicas compañías en toda Europa que se dedica a la producción de esta tecnología para el sector de la aviación.
La empresa se ha especializado en la fabricación de productos muy ligeros gracias a materiales compuestos como la fibra de carbono, que incrementan la seguridad de la batería gracias a su resistencia térmica.
El proyecto de Bold comenzó con la creación de la empresa en 2019 por parte de Bernat Carreras Planella, un exingeniero de equipos de Fórmula 1 como McLaren, Renault-Alpine y Honda, especializado en el diseño de materiales compuestos y baterías eléctricas. Hasta el momento se han dedicado a los servicios de ingeniería para equipos de Fórmula 1 y al diseño de materiales de componentes estructurales para fabricantes de automoción de vehículos de altas prestaciones.
Recientemente, la empresa cerró una ronda de inversión de 2,3 millones de euros liderada por David Vilanova, miembro de la compañía de producción de maquinaria Tavil, y Josep Maria Tarragó, inversor en fase inicial de empresas como Wallbox.
En el marco de su estrategia de crecimiento, la empresa tiene previsto abrir próximamente oficinas en Reino Unido y Estados Unidos.