Redacción. Las vacaciones son un tiempo para relajarse, disfrutar y desconectar de la rutina diaria. Sin embargo, a medida que los días de descanso llegan a su fin, nos enfrentamos a un desafío común: retomar nuestras actividades habituales y reintegrarnos a nuestra vida cotidiana.
Una de las mejores formas de hacerlo, aunque pueda parecer extraño, es incorporando el ejercicio después de las vacaciones. La vuelta del periodo vacacional ofrece una oportunidad para comprometernos con nuestra salud física y mental. Y entrenar ambas nos será de ayuda para retomar nuestra rutina.
Desde las empresas, el wellbeing corporativo es una solución. Implementar herramientas para ayudar a los colaboradores a volver a la rutina, integrando hábitos de vida saludables, es una manera de garantizar el bienestar y la salud entre los equipos.
¿Y por qué es importante introducir el ejercicio de manera regular? Por lo siguientes motivos:
- El cambio de ritmo y sus efectos
Después de días de relajación y disfrute, nuestro cuerpo y mente pueden haberse acostumbrado a un ritmo más lento. La reintroducción del ejercicio después de las vacaciones es fundamental para reactivar nuestro metabolismo, mejorar nuestra energía y aumentar nuestra sensación de vitalidad.
Cuando nos movemos, liberamos endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad, que no solo nos hacen sentir bien, sino que también contribuyen a aliviar el estrés y la ansiedad.
- Compromiso con la salud a largo plazo
Incorporar el ejercicio regular después de las vacaciones no solo tiene beneficios inmediatos, sino que también establece un compromiso con nuestra salud a largo plazo.
En un mundo en el que el sedentarismo y las responsabilidades diarias pueden interferir con nuestras intenciones de mantenernos activos, la vuelta de vacaciones nos da una magnífica oportunidad para reevaluar nuestras prioridades. Al comprometernos con el ejercicio, estamos invirtiendo en un futuro más saludable.
- Superar la barrera de la pereza
Uno de los mayores obstáculos para retomar el ejercicio después de las vacaciones es superar la barrera de la desgana. Es fácil caer en la mentalidad del "mañana empiezo" o "necesito más tiempo para volver a entrenar".
Sin embargo, atrasar el inicio del ejercicio solo prolonga el proceso de adaptación y nos aleja de los beneficios que ofrece. Lo recomendable es comenzar con pequeños pasos, como caminatas cortas o rutinas de estiramientos, y aumentar gradualmente la intensidad a medida que te adaptas.
- La variedad es la clave del ejercicio tras las vacaciones
Otra estrategia efectiva para introducir el ejercicio después de las vacaciones es buscar actividades que nos resulten divertidas y atractivas. La diversidad es la clave para mantener el compromiso a largo plazo.
Desde clases de baile hasta senderismo en la naturaleza o sesiones de yoga, existen numerosas opciones para encontrar una actividad física que se adapte a nuestros gustos y estilo de vida.
Recuerda que en tu plataforma saludable tienes disponible muchas disciplinas distintas para probar.
- La rutina como aliada
Si bien las vacaciones a menudo implican un descanso de las rutinas habituales, reintroducir el ejercicio regular puede ser más sencillo cuando se incorpora a una rutina diaria.
Programar el ejercicio a la misma hora cada día puede ayudarnos a establecer un hábito más sólido. Además, planificar las sesiones de ejercicio con anticipación evita que las excusas o compromisos imprevistos nos impidan cumplir con nuestra meta.
- La motivación para incluir el ejercicio después de las vacaciones
La vuelta de vacaciones también nos da la oportunidad de unirnos a grupos de ejercicio o comunidades locales. Participar en clases grupales o entrenar con alguien de nuestro entorno con quien tengamos buena relación no solo agrega una dimensión social a nuestras actividades, sino que también nos motiva a ser constantes y mantenernos en movimiento.
La responsabilidad compartida y el apoyo de compañeros y compañeras pueden ser factores clave para superar la pereza inicial y mantener el compromiso con el ejercicio.
La vuelta de vacaciones, no tiene por qué ser sinónimo de un regreso a la rutina monótona. Más bien, es una oportunidad para comenzar de nuevo, priorizar nuestra salud y bienestar y, lo más importante, establecer bases sólidas para un estilo de vida activo y equilibrado.
Al incorporar el ejercicio regular a nuestra rutina diaria, no solo nos beneficiamos físicamente, sino que también cultivamos una mentalidad de compromiso con uno mismo y el cuidado personal.