Redacción. Las mujeres que buscan empleo en LinkedIn tienen un 16 % más de posibilidades de ser contratadas que los hombres, pese a que optan a un 20 % menos de ofertas de trabajo que estos por ser más selectivas.
Así lo pone de relieve un análisis realizado por la red social profesional de los resultados de su estudio de comportamiento de los usuarios de la plataforma a la hora de buscar y solicitar un nuevo empleo y cómo son reclutados por los profesionales de RRHH.
LinkedIn destaca que el crecimiento profesional es una prioridad común a ambos sexos. Tanto hombres como mujeres están interesados en optar a nuevas oportunidades de empleo y abrir una conversación con reclutadores, y utilizan la plataforma para obtener información sobre la empresa que ha publicado la oferta en la que están interesados.
Sin embargo, a la hora de optar a un empleo comienzan las diferencias. Las mujeres solo aplican a las ofertas en las que sienten que cumplen con el cien por cien de los requisitos; frente a los hombres, que lo hacen cuando superan el 60 %. Esto explica por qué las mujeres solicitan menos de trabajos en LinkedIn que los hombres, del mismo modo que piden un 26 % menos de recomendaciones a su red de contactos, aún sabiendo que es una de las fuentes de información de calidad más valoradas por los reclutadores.
Al enfrentarse a una oferta de empleo, además de comprobar que cumplen con los requisitos solicitados por el empleador, ellas valoran más que los hombres el sueldo y los beneficios sobre políticas de trabajo flexible, bajas por maternidad y paternidad o tener asistencia sanitaria, 68 % frente al 58 %, y las tareas del a día que tienen que realizar, 50 % frente al 41 %.
En el sentido opuesto, los hombres tienen más en cuenta las oportunidades de desarrollar su carrera profesional a largo plazo que la mujeres, 34 % frente al 28 %.
Una vez efectuada la solicitud de empleo, las mujeres tienen ese 16 % más de probabilidades de ser contratadas que los hombres a través de LinkedIn, a pesar de ser más selectivas y de que los reclutadores abren con más frecuencia perfiles masculinos en la búsqueda de profesionales para cubrir las vacantes de su empresa.
Tanto es así que los perfiles femeninos reciben un 13 % menos de clics por parte de los profesionales de RRHH.
Para combatir este sesgo, cada vez más compañías están implementando las contrataciones anónimas y eliminando identificadores clave como los nombres o fotos de los candidatos.