Imagen de la noticia

Redacción. Fidelitis, grupo español de consultoría legal especializado en discapacidad y enfermedades graves, ha denunciado la falta de responsabilidad de algunas empresas y, sobre todo, de las instituciones, ante el peligro al que se enfrentan los trabajadores que se ven obligados a acudir a sus puestos de trabajo.

“En las empresas les obligan a seguir trabajando, con amenaza de despido procedente en caso de no acudir al puesto de trabajo y con el consiguiente riesgo de contagio”, según asegura Lorenzo Pérez, presidente de Fidelitis.

Según la consultora, en muchos casos ni en el puesto de trabajo está cumpliendo con lo previsto en la normativa de prevención de riesgos laborales, en este caso, de contagio, ni, sobre todo, en los desplazamientos de ida y vuelta de su puesto de trabajo en transporte público.

Fidelitis se ha puesto en contacto con los presidentes de las diferentes asociaciones con las que colabora en su día a día para comprobar que la situación es generalizada en todas ellas y que, por ejemplo, el presidente de la Asociación Madrileña de Fibrosis Quística, Fernando Moreno, hablaba ayer mismo de “casos dramáticos de pacientes trasplantados con rechazo parcial, tratados con inmunosupresores, etc., que tienen que seguir trabajando arriesgando sus vidas por el miedo a perder su trabajo”, una situación que mantiene en vilo a muchos trabajadores en España.

Además, la consultora señala que “de poco valen los informes presentados en la Seguridad Social. Actualmente, aunque el individuo aporte informes de sus especialistas acreditando que se encuentran en un grupo de riesgo absoluto por estar inmunodeprimidos, al estar asintomáticos no les conceden la baja pertinente para prevenir su contagio”.

“¿Si la directriz es proteger a los grupos de riesgo, como son los mayores, por qué no se está haciendo lo mismo con las personas que tienen una enfermedad grave y si se contagia corre riesgo de muerte?”, pregunta Lorenzo Pérez.

Con este panorama, Pérez ha explicado cómo actuar ante una situación como la denunciada por Fidelitis:

Lo primero es presentar escrito formal ante la Consejería de Salud que corresponda para advertirles del riesgo al que está exponiendo al paciente. Paralelamente, se debe dirigir un escrito a la dirección de RRHH de la empresa en el que se expliquen los riesgos que supone para el empleado el desarrollo de la actividad sin que se pongan las convenientes medidas de adaptación al puesto de trabajo.

Después, habría que dirigir un escrito a Inspección de Trabajo explicando que la empresa está incumpliendo con lo previsto en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales para que tome medidas al respecto.

“Se puede llegar a entender que las empresas privadas, por desconocimiento general, no apliquen estas medidas, lo que no es de recibo es que el Gobierno no tome las riendas de la situación y siga sin tomar medidas concretas para dejar de exponer a la población de riesgo”, concluye Lorenzo Pérez.

Utilizamos cookies propias y de terceros para posibilitar y mejorar su experiencia de navegación por nuestra web. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.